Evolución de los comprobantes fiscales impresos a digitales

La era de papel

Antes de 2004, el proceso de comprobación fiscal en México empleaba papel impreso, los contribuyentes, tenían que gastar en servicios de impresión, distribución y control de las facturas impresas, revisión, envío, verificación de requisitos, correcciones y reexpedición, así como el archivo y organización de las facturas.

Durante muchos años, la impresión de facturas era la única forma de controlar las transacciones realizadas por por los contribuyentes, quienes tenían la necesidad de pagar por la impresión de las facturas y lidiar con la trae de almacenar los comprobantes físicos, mientras que para la autoridad resultaba en un problema complejo de controlar, pues el uso de comprobaste fiscales en papel, se prestaba para malas prácticas que resultaban en defraudaciones fiscales.

facturas en papel

Es así, como el SAT en la búsqueda de modernizar los tramites relacionados con los comprobantes fiscales, inicia una nueva etapa en el proceso de facturación y se prevé la utilización de la tecnología para simplificar el proceso de facturación.

El SAT integro un grupo de trabajo interdisciplinario, normativo y desarrollador de soluciones para impulsar el programa de modernización de la comprobación fiscal, con el propósito de generar, procesar, intercambiar y resguardar documentos fiscales digitales.

El 5 de enero de 2004 se publica en el Diario Oficial de la Federación el esquema del Comprobante Fiscal Digital, que entro en vigor ese mismo año.

El 31 de mayo se publica el Anexo 20 con los estándares técnicos del comprobante fiscal
digital.

En 2005, arranca la facturación electrónica con la versión 1.0. Aún no era obligatoria.

La era de transición

Esta etapa de la evolución del proceso de comprobación fiscal abarcó de 2005 a 2013, en este periodo aún exista el comprobación en papel.

En 2010, el SAT emite un comunicado, para informa a los contribuyentes cuyos ingresos a diciembre de 2009 no hubieran sido mayores a cuatro millones de pesos, la facilidad de continuar con la emisión de comprobantes en papel, con la incorporación de un código de barras bidimensional (CBB) a los comprobantes fiscales, este código permitía verificar los datos del emisor y dar una certeza sobre la autenticidad del comprobante fiscal.

codigo bidemensional

La era electrónica

La reforma fiscal publicada el 7 de diciembre de 2009, manifiesta la eminente obligatoriedad de expedir comprobantes fiscales digitales por las operaciones realizadas.

Sin embargo, a través del Artículo Décimo Transitorio, fracción I, se pospone la obligatoriedad hasta el 1 de enero de 2011, durante este año, los contribuyentes puedan optar por dos esquemas de emisión de comprobantes digitales:

  1. Por medio propios: el contribuyente utilizaba los folios solicitados al SAT, así como el número de serie, en el sistema electrónico contable que utilizaba, el cual debía registrar la fecha, hora, minuto y segundos exactos en que se generaba el comprobante fiscal.
    • Este sistema debería generar el reporte mensual de los folios de comprobantes fiscales emitidos en un archivo que contendrá la FIEL del contribuyente, todos los certificados de sello digital estaban bajo el control y administración del contribuyente.
  2. Por un “Un Proveedor Autorizado de Comprobantes Fiscales Digitales (PACFD)
    1. Un PACFD, es quien cuenta con la autorización del Servicio de Administración Tributaria para generar y procesar fuera del domicilio fiscal del quien lo contrate, los comprobantes para efectos fiscales por medios electrónicos y de manera 100% digital

A partir del 1 de enero de 2011, inicia el uso generalizado de los comprobantes digitales a través de un nuevo esquema contemplado en el Artículo 29 del CFF: El Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI).

El 1 de julio de 2017 entra en vigor la versión CFDI 3.3, incorporando los siguientes cambios:

  • La estandarización de información a través de catálogos
  • Nuevas reglas para validar la información
  • La obligación de informar cuándo se reciben los pagos relacionados a una factura, esto con el propósito de elevar la calidad de la información que recibe el SAT.
  • La versión 3.3, incorporo el complemento de recepción de pagos y el proceso de aprobación por parte del cliente para la cancelación de las facturas electrónicas.

Hasta 2021 la versión 3.3 era la única versión válida para la emisión de facturas electrónicas, Esta debe de incluir

En 2022, derivado de la ultimas reformas fiscales la versión CFDI 3.3 que utilizamos todos los contribuyentes será valida hasta 30 de junio de 2022.

La nueva versión de CFDI 4.0 entro en vigor a partir del 1 de enero de 2022, y se encuentra en un periodo de convivencia con la versión 3.3 del CFDI, este periodo comprende del 1 de enero de 2022 al 30 de junio de 2022, por lo que, a partir del 1 de julio de 2022 la única versión valida será la 4.0.

Beneficios de los comprobantes fiscales digitales

De acuerdo con la autoridad, el empleo de comprobantes electrónicos, trajo consigo los beneficios siguientes:

  • Reducir tiempos y procesos administrativos;
  • Brindar rapidez y seguridad en el intercambio de información;
  • Agilizar la recepción de mercancía, lo cual se traduce en ahorros y en un incremento a la productividad;
  • Lograr ahorros de los costos en el proceso de facturación al eliminar gastos de impresión, almacenaje y envíos;
  • Facilitar procesos administrativos, recepción y envió oportuno de los comprobantes fiscales;
  • El receptor tiene el beneficio de recibir su factura de forma rápida y la oportunidad de validar la factura electrónica recibida;
  • Y por supuesto, la autoridad tiene un mejor control fiscal de los Ingresos de los contribuyentes, lo que ayuda a la disminución de la evasión fiscal.
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